lunes, 25 de febrero de 2008

Diario de batalla: Operación Rudger Hunter

Saludos Camaradas hermanos de nuestra Gran República. Henos aquí reunidos de nuevo para comentar los hechos acontecidos en La Rioja en Lost Town el pasado 23 de enero del año de la coliflor marchita. En una de las batallas con mayor cantidad de soldados que las mentes de los más viejos aún puedan recordar, el Ejército Rojo volvió a enfrentarse a su más temible enemigo: el equipo azul. La razón de la batalla fue el conocimiento de ambos bandos de un artefacto explosivo en tierra de nadie que ambos debíamos recuperar. Por otro lado, entre las filas de los cerdos azules (como lo oyes) había una científica loca, de esas que experimentan con embriones humanos, a la que teníamos que segar la vida.Sin embargo, el equipo azul es perro viejo y como se inventa los guiones nos mandó a tomar por culo para luego tener que volver a la misma posición. Cansados pero sin flaquear, nos dividimos en 4 escuadras. Los hermanos O´Hara, Vinyard y Yo nos presentamos voluntarios para formar parte del primer escuadrón, cuya misión era patear como auténticas gacelas hacia la posición de la bomba.
Así pues, una vez llegamos a la posición, divisamos fuerzas enemigas y tomamos posiciones. Los siguientes minutos fueron confusos, consiguiendo, perdiendo y recuperando el artefacto, hasta por fín ser abatidos al completo por el vil enemigo. Incapacitados y sin atención médica, sólo podíamos ver cómo el entramado médico enemigo hacía posible el avance de su ejército. Sin embargo tenían otro punto a favor: la inmortalidad! Al rato de estar sentados y aburridos como patatas, el compañero Gavioto abandonó la partida en clara protesta por la presencia de inmortales. Dicha presencia fué confirmada a lo largo de todo el día por numerosos participantes, incluido un servidor. Además, conocemos perfectamente al grupo al que pertenecían, ya que su vestimenta les diferenciaba claramente (a pesar de ello no daré más información). Sólo diré que en las partidas posteriores decidimos disparar a saco contra ellos, y lo notaron :)

Resumiendo, vista la falta de logística y que llevábamos media hora sentados, nos fuimos pa los coches a almorzar. Sin embargo, vino un emisario aliado a decirnos que la encarnizada batalla situaba el frente en la parte trasera del pueblo, así que los valientes soldados fuimos a nuestra trinchera, desde donde intentamos internarnos sin mucho éxito. El grandísimo trabajo médico aquí ejercido será siempre recordado, ya que gracias a él pudimos abatir a innumerables enemigos. Con el tiempo nuestros hombres también fueron cayendo, y los últimos supervivientes intentamos forzar la entrada al pueblo. Ya casi todos muertos, antes de entrar al pueblo, el silbato pitó y la partida finalizó.

Durante la comida se dieron grandes muestras de afecto.

De vuelta a la batalla, los pitufos tenían que tomar la bandera situada en la casa blanca del pueblo, mientras el Glorioso Ejército Rojo mantenía el frente. Y lo sufrieron. Supimos defendernos con uñas y dientes hasta el último hombre, pero su sistema de vidas infinitas hacía imposible la victoria. Junto a mis hermanos rojos fortalecimos varios frentes de tal modo que era imposible acceder por ellos, posiciones desde las que abatimos a muchos de los anteriores inmortales (y doy fé de que les dolió). La llamada de refuerzos hizo que Vinyard y yo abandonásemos la posición, donde O'Hara permaneció solo y copado, no sólo con valentía, sino con una gran cantidad de sangre en sus manos (6 muertes + 2 a cuchillo, una carnicería que sin duda no habría podido llevar a cabo sin si nueva y por cierto preciona gran coraza color tan). Vinyard y yo caímos defendiendo la entrada del Norte del pueblo, pero sin duda alguna cayeron muchos, muchos enemigos antes de poder tomar su bandera.

En esta hora donde hemos perdido los objetivos sólo puedo decir que defenderlos era imposible (guión equipo azul), pero sin duda alguna hemos puesto muy difícil y sobre todo muy costoso en vidas humanas que el equipo pitufo pudiera mantener su escaso honor.
En cuanto a nuestos caídos, sin duda nunca os olvidaremos. Sobre todo a todos aquellos soldados que no conocíamos y han demostrado su valor, así como a aquellos que sí conocíamos y han estado a la altura de sus nombres.


























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2 comentarios:

Anonymous Anónimo ha dicho...

Bienvenida fue la apertura de la caza de la cucaracha.

Fuerza eterna para el siempre grande Ejercito Rojo. Gloria y honor. Porque podrán eliminarnos, pero nunca derrotarnos.

Antes muerto que azul.

25 de febrero de 2008, 10:09  
Anonymous Anónimo ha dicho...

Es más, y mira lo que digo:
Antes DESCONJUNTADO que azul!
Ahí dejo eso.

PD:han llegado fotos nuevas así que editaré el post.

25 de febrero de 2008, 11:53  

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